El comienzo de la cinta

La Sala se oscurece y comienzas a sentirte en una atmosfera distinta. Reconozco que nunca me interesó profundamente el mundo del Cine, siempre creí que era una perdida de tiempo sentarse durante dos horas a ver a otros humanos jugar a que eran personas distintas. Sin embargo la vida cambia y conoces a gente que te enseña que no siempre (o muy pocas veces) en lo cuantificable económicamente está la grandeza del Ser.
Así es como desde unos años a esta parte el cine ha sido mi gran compañero. Con él, y en el formato que sea, he logrado hacer grandes migas, me ha permitido admirarlo y encontrarle un nuevo sentido a la existencia, haciendo de la pantalla una suerte de extensión de espacios que no visitaré, de tiempos que no recorreré y de historias que no podré vivir.
Este blog es la extensión para mi frágil memoria (muy frágil), de las películas que he podido ver de un tiempo a esta parte.
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