Nationale 7 (La Terapia del Placer) / 2000
Jean Pierre Sinapi / Francia
La discriminación, las diferencias, ese ha sido un tema recurrente en nuestro país en el ultimo tiempo y como casi todas los temas importantes de la vida poseen al menos una película que nos lleve a reflexionar sobre ello.
En el año 2000 en Francia el director Jean Pierre Sinapi nos lleva a uno de esos lugares que la mayoría de las personas rehuimos. Los asilos son como los modernos leprosarios, nadie quiere acercarse demasiado a ellos, ya sea por miedo, pena, asco o cualquiera de las sensaciones que pueda provocar ver a gente “distinta”.
La historia de la película se desarrolla en un Asilo de paralíticos y que tienen consecuencias mentales de su parálisis. La primera escena nos muestra a un grupo de jóvenes que vienen desde un viaje a un templo católico y cantando alguna de las alabanzas que aprendieron en el templo. La primera sensación que provoca esta imagen es de lejanía y algo de gracia, sin embargo para el final de la película ya nos sentiremos casi como parte de ese grupo de muchachos.
El personaje principal se devela en la segunda escena. Su nombre es “Rene”, protagonizado por Olivier Gourmet quien interpreta a un hombre que tras una vida activa pierde su movilidad desde la cintura para abajo y en una progresiva perdida de movimiento total del cuerpo. Rene se muestra como un hombre desagradable, amante de las películas pornográficas de mayor dureza y de malos modales y tratos con el personal del asilo.
Por otro lado se encuentra Julie (Nadia Kaci), una mujer solitaria y dedicada a su trabajo como terapeuta en el Asilo. Julie es una chica bella, pero que esta tan paralizada como sus pacientes, aunque esta en la mente y el alma, apegándose aun a ciertos prototipos de triunfo emocional y pensando que su tiempo para el amor esta por pasar.
La medula de la película se muestra cuando el molesto y acido Rene rompe en llanto mostrando su verdadero malestar. Sabe que quedara completamente inmóvil y desea usar sus últimas energías teniendo sexo con una mujer. La situación es compleja porque no muchas mujeres estarían dispuestas a estar con un paralítico, es axial como el propone la idea de estar con una prostituta.
Tras las complicaciones para poder conseguir a una meretriz y lograr consumar el acto, Rene se convierte en un ser distinto, ahora es alegre y amable e incluso comienza un romance con una mujer que trabaja en el Hospicio.
La película nos habla sobre las diferencias, sobre cuan normales realmente somos y sobre la aceptación al otro. A veces nosotros estamos más enfermos que los enfermos.
Las historias subyacentes de la película como la del joven Musulmán, homosexual, lisiado y amante de la música de Johnny Hallyday (muchas cosas para ser discriminado) o la de una mujer que crea una fantasía sobre su matrimonio feliz cuando este no existía con parte importante de la cinta. La valoración del otro sin más que el respeto y la admiración y el aporte de las prostitutas a la sanación de los enfermos complementan una película sanadora.
“La Terapia del placer” se presentó en el festival de Sundance en 2000.
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